martes, 31 de julio de 2012

LA LLAMADA DE ÁFRICA

Estando en Estambul hace unos días, tome uno de esos cafés turcos en los que dicen que, en sus posos, es posible leer el porvenir.  Lo que salió os lo enseño en la foto ¿Premonición?

Ayer mi cuerpo llegó a Dakar, aunque mi cabeza ya lleva días por aquí.

En cambio, no lo hicieron mis maletas. ¡No sé porque se empeñan en despistarse!  Tuve que presentar la reclamación, en medio del caos reinante. Hoy tendré que volver a por ellas.

De momento no me estreso porque mi equipaje de mano iba bastante completo. Calma africana.
Pasaré dos días en Dakar, visitando empresas de instalaciones solares y haciendo algo de turismo.

lunes, 30 de julio de 2012

LLEGADA A DAKAR

Con mi facilidad innata para dormir en los medios de transporte públicos, del vuelo entre Madrid y Dakar ni me enteré. Mi compañero de asiento me despertó amablemente, para que pudiera degustar la fantástica cena. Llegada a Dakar pasada la medianoche. Todo en orden, salvo un pequeño inconveniente: las maletas no aparecen.

Después de preguntar mucho, decir que no a varios mozos de maletas que se ofrecían a ayudarme, pagando, claro, consigo encontrar la oficina de reclamaciones. Hago lo propio, y me dicen que llame mañana y que las maletas llegarán por la noche. No me quedo muy convencida, pero tampoco puedo hacer otra cosa. Menos mal que prácticamente todo lo que necesito va en mi equipaje de mano.
Aeropuerto de Dakar

Salgo del destartalado y ruidoso aeropuerto mareada del jaleo. Un shock, tras haber estado tan tranquila escuchando música y durmiendo en el avión. Estas llegadas siempre son un poco accidentadas, pienso.

Ousmane me está esperando. Es el contacto de CC ONG en Dakar, y la persona que nos llevará hasta Ndokh.

Me pregunto cómo vamos a encontrarnos entre tanta gente. Quedamos que lo llamaría, pero mi teléfono no funciona. De pronto, un chico con aspecto de rastafari me dice: - “¿Tu es Ana?” Y yo le respondo: - “¿Ousmane?” Oui, oui. 

Nos vamos en un destartalado taxi negro y amarillo, con un plástico pegado con cinta aislante por luna trasera. El albergue está en un barrio de la periferia, así que no me da tiempo a ver mucho.

Ducha, relec, mosquitera y sueño profundo. À demain.

domingo, 29 de julio de 2012

PRÓXIMA ESTACIÓN: NDOKH


No es extraño que se me haya ocurrido este título para el post. 
¡¡Una semana llevamos canturreando todos los temas de  Manu Chao, después del inolvidable concierto del día 25 en Pirineos Sur!!.

"Próxima Estación: Esperanza" fue un disco que me gusto mucho en su día, allá por el 2001. Hablaba, como en toda su discografía, de la desigualdad, y de las injusticias sociales, que desgraciadamente no han ido a mejor, sino al contrario. No hay más que mirar el desalentador panorama global once años después.

No entro en la calidad musical, ni en la veracidad de su mensaje o su implicación social.
No me olvido de que con los ingresos obtenidos cantando a la pobreza se podrían construir muchas más escuelas y dispensarios, y seguro que se podría iluminar cien veces Ndokh.

Obviando todo lo anterior, y desde un punto de vista objetivo, hay que reconocer la importancia de su labor de difusión y concienciación, cómo la de la de otros personajes mediáticos.

Si, si, es muy triste ser solidario porque has visto que tu actor, cantante o futbolista favorito lo son, pero así funciona el mundo, y cambiarlo es muy difícil.

Y mientras tanto, en otra pantalla, estamos los voluntarios anónimos, aquellos que, cuando las circunstancias nos lo permiten, acudimos a dejar nuestro "granito de arena", para contribuir humildemente a esa tan ansiada igualdad, o al menos para aportar un poco de esa ESPERANZA a la que le canta Manu Chao.

Con la solidaridad, los famosos ganan dinero.
Los anónimos ganamos muchas otras cosas...QUE MASTERCARD no puede comprar.

viernes, 20 de julio de 2012

ENCIENDE UNA LUZ




Según los últimos estudios publicados por la Agencia Internacional de la Energía (AIE) y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) actualmente más de 1.400 millones de personas en el mundo carecen de acceso a servicio eléctrico alguno, principalmente en zonas rurales de África Subsahariana, Asia sur y América Latina.

La reducción del déficit de electrificación pasa obviamente por soluciones basadas en energías renovables y eficiencia energética.

El proyecto “Enciende una luz en Ndokh” nace con la voluntad de crear una microrred solar 100% fotovoltaica, para responder a las necesidades básicas de electricidad de esta pequeña comunidad rural, de aproximadamente 500 habitantes, situada en la región de Fatik, a unos 150Km. al este de Dakar.





El proyecto de electrificación, comienza con una primera fase en la que:

  • Se realizará el estudio de necesidades,
  • Se determinará la solución tecnológica que mejor se adapte a las mismas.

Las estimaciones se realizarán en base al suministro un servicio eléctrico de 24h/día, con una calidad comparable a la de una red de distribución tradicional (230V, 50 Hz), y responde a las necesidades básicas de iluminación, comunicaciones y otros servicios útiles a la comunidad como el alumbrado público y a la de producción de hielo.

CC ONG Ayuda al Desarrollo pretende, con este proyecto, llevar a cabo todas las actividades: desde los estudios preliminares y el diseño hasta la puesta en marcha y la puesta en servicio, incluyendo la formación básica de buenas prácticas para los usuarios y la capacitación de técnicos para el futuro mantenimiento de las instalaciones.

Todavía no se dispone de financiación, por lo que invitamos a cualquiera que pueda estar interesado en el proyecto a que se ponga en contacto con nosotros.

viernes, 6 de julio de 2012

DE ESTAMBUL A NDOKH

Blue Mosquee en Estambul
Os preguntaréis por que empieza así este blog. Muy sencillo: Porque ahora estoy aqui...pero mi cabeza está ya alli.

He venido a hacer un curso de formación para un trabajo que ya no voy a tener. La beca que me han dado es la mitad de lo que solian dar otros años. Estoy en una habitacion compartida sin baño donde no tengo ni enchufe para cargar el ordenador. Tengo que poner dinero de mi bolsillo, y para colmo el curso no responde a las expectativas.

Ademas, reniego desde la manana de lo caro que es todo, y de que odio ser turista sin dinero. Parece desalentador, ¿verdad?

Pues aun con todas estas cosas negativas, Estambul es una ciudad increible. Me alegro de poder estar aqui, de admirar todas sus maravillas, de escucharla, de olerla, de charlar con sus gentes, de regatear a muerte hasta el centimo, de que se rian de mi ingles con acento español, y de ver esos fantásticos atardeceres.


No sé como sera Dakar, ni Fatik ni Ndokh. No se qué experiencias me aguardan, ni que inconvenientes me voy a encontrar.

Pero tengo claro que quiero viajar, moverme, experimentar.
Cambiar, pensar, aprender, adaparme, evolucionar...para luego volver a cambiar. Ese proceso, ese crecimiento personal es lo que me motiva y me da fuerza.

Lo de Estambul es un viaje y ya se acaba. Senegal es mucho más ...y aunque todavia no estoy alli, en mi cabeza la experiencia ya ha empezado.